viernes, 20 de julio de 2007

Consejos para el consumo eficiente de Energía (1 de 7)

CONSEJOS PARA EL CONSUMO EFICIENTE Y RESPONSABLE DE LA ENERGÍA

INTRODUCCIÓN

Como todos sabemos, el desarrollo económico y social está unido al consumo de energía, que nos ha permitido mejorar y modernizar nuestro estilo de vida y nuestra sociedad.
Sin embargo, el consumo y abastecimiento energético, en su planteamiento actual, comprometen el desarrollo de las generaciones futuras, ya que conllevan el agotamiento de los combustibles y generan problemas medioambientales de alcance mundial. No olvidemos que de la transformación, transporte y uso final de la energía se derivan importantes impactos medioambientales, entre los que destaca la generación de la mayoría de las emisiones de CO2.
En este sentido hay que resaltar que en el sector industrial, a partir de las crisis energéticas de los años 70 y 80, se pusieron en marcha medidas de mejora tecnológica y de diversificación que mejoraron sustancialmente su eficiencia energética. Mientras que en el transporte y los edificios, incluyendo los hogares, la eficiencia energética no se ha promovido tanto como sería deseable.
Sin embargo, todos los ciudadanos, como consumidores de energía, debemos tener conciencia clara del valor de la energía y de la importancia de su uso eficiente. Más aún porque del uso racional de la energía se deriva un aumento de la calidad de vida, ya que nos permite disponer de mayores prestaciones, mejores servicios y confort, sin consumir más energía.
Por este motivo, desde esta sección de Consejos se pretende que todos nosotros, como consumidores, conozcamos y comprendamos el valor intrínseco de la energía y, con ello, adquiramos unos hábitos de consumo energético sostenible, aplicables a nuestra vida cotidiana, tanto en el hogar, como en el trabajo o en nuestros desplazamientos.
Se trata de tener en cuenta unas sencillas pautas de conducta que, en definitiva, suponen asumir la necesidad de hacer un uso racional y eficiente de los recursos que nos brinda la naturaleza.


Fuente: Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía

Consejos para el consumo eficiente de Energía (2 de 7)

COMPRAR BIEN, COMO ELEGIR SU COMPRA


INTRODUCCIÓN

Los electrodomésticos, la cocina, la iluminación, el aire acondicionado y el coche son, entre otros, equipamientos de uso común entre los consumidores. Y la decisión de compra de todos y cada uno de estos equipos depende, exclusivamente, de nosotros. Por este motivo, es importante que tengamos en cuenta que un electrodoméstico, a lo largo de su vida útil, puede producir un gasto en la factura eléctrica varias veces superior a su precio de adquisición. Lo que significa que, a la hora de comprarlos, es fundamental pensar en este factor y elegir aquél cuyo consumo energético sea menor, lo que nos permitirá amortizar su mayor coste inicial. También es preciso elegir un electrodoméstico adaptado a nuestras necesidades. No basta con que el equipo sea eficiente; es determinante que tenga el tamaño y ofrezca las prestaciones adecuadas a nuestros usos. Todo lo demás es derrochar energía. Con los consejos de esta sección y la ayuda de la etiqueta energética, los consumidores tenemos información suficiente para poder tomar decisiones acertadas que tendrán una gran repercusión positiva tanto en nuestro consumo energético como en el medio ambiente.


LA ETIQUETA ENERGÉTICA

Recuerde que el vendedor tiene obligación de mostrar en los electrodomésticos, de manera bien visible, la etiqueta energética correspondiente que compara su eficiencia respecto a la de otros modelos y/o marcas.
Los electrodomésticos de clase A son los más eficientes y los de clase G, los menos eficientes. Tenga en cuenta que los de clase A, a lo largo de su vida útil, pueden ahorrarnos, en consumo eléctrico, más de 600 euros.


FRIGORÍFICOS

No compre un equipo más grande del que necesita. Para decidir el tamaño y el modelo más adecuado, analice primero sus necesidades en función del número de habitantes de la casa, los hábitos de compra y las comidas.
El hielo y la escarcha son aislantes y dificultan el enfriamiento en el interior del frigorífico. Existen modelos, los llamados "no-frost", o sin escarcha, que tienen una circulación continua de aire en el interior que evita la formación de hielo y escarcha.
Uno de los factores a tener en cuenta a la hora de comprar un frigorífico es conocer si en su proceso de fabricación se han utilizado elementos o materiales reciclados.
Es importante también conocer si existen líneas de reciclado y recogida para el momento en que quiera deshacerse de él.
Compre aparatos con etiquetado energético de clase A. Ahorran energía y dinero.


COCINAS, HORNOS Y MICRO-ONDAS

Según la energía que utilizan cabe distinguir dos tipos de cocinas: a gas y eléctricas. Las eléctricas a su vez pueden ser de resistencias convencionales, de tipo vitrocerámico o de inducción.
En general, se puede afirmar que las cocinas eléctricas son menos eficientes que las de gas. Si bien las de inducción calientan los alimentos generando campos magnéticos y son, por tanto, mucho más rápidas y eficientes que el resto de las cocinas eléctricas.
Entre los usuarios domésticos son más frecuentes los hornos eléctricos que los de gas. A la hora de comprar uno, procure que sea de clase A. Un horno de clase G consumirá más del doble de energía que uno de clase A.
Recuerde que los hornos de convección favorecen la distribución uniforme de calor, ahorran tiempo y gastan menos energía.


LAVADORAS

Existen en el mercado lavadoras con programas de media carga, que reducen el consumo de forma apreciable.
Analice los ciclos de lavado que ofrece cada modelo y recuerde la importancia de disponer de un ciclo económico y corto; y la posibilidad de elegir distintas temperaturas de lavado.
Hoy en día se venden lavadoras bi-térmicas, con dos tomas de agua independientes: una para el agua fría y otra para el agua caliente. De este modo, el agua caliente se toma del circuito del calentador o caldera, reduciendo un 25% el tiempo de lavado y ahorrando energía.
Tenga en cuenta que las lavadoras de carga frontal gastan, generalmente, menos energía y agua que las de carga superior.
Las lavadoras con sonda de agua, que miden la suciedad del agua y no la cambian hasta que sea necesario hacerlo, reducen de manera importante el consumo de agua y de energía.
Uno de los factores a tener en cuenta a la hora de comprar una lavadora es conocer si en su proceso de fabricación se han utilizado elementos o materiales reciclados.
Es importante también conocer si existen líneas de reciclado y recogida para el momento en que quiera deshacerse de ella.
Compre aparatos con etiquetado energético de clase A. Ahorrará energía y dinero.




LAVAVAJILLAS

Elija el tamaño de su lavavajillas en función de sus necesidades. Recuerde que si normalmente tiene poca vajilla que lavar, difícilmente podrá utilizar un lavaplatos grande a plena carga.
El lavavajillas es uno de los electrodomésticos que más energía consume. Y un 90% de ese consumo se debe al proceso de calentar el agua. Por eso recuerde que las mejoras tecnológicas permiten disponer de modelos que seleccionan la temperatura del agua y de programas económicos que permiten reaprovechar el calor del lavado para el aclarado o el secado, sin tener que consumir más energía.
Existen en el mercado los llamados lavavajillas bi-térmicos, que tienen dos tomas independientes, una para el agua fría y otra para el agua caliente. De este modo, el agua caliente se toma del circuito procedente del calentador o caldera, reduciendo un 25% el tiempo de lavado y ahorrando energía.
Uno de los factores a tener en cuenta a la hora de comprar un lavavajillas es conocer si en su proceso de fabricación se han utilizado elementos o materiales reciclados.
Es importante también conocer si existen líneas de reciclado y recogida para el momento en que quiera deshacerse de él.
Si es posible, elija un lavavajillas de clase A. Los equipos con etiqueta energética de clase A ahorran energía y dinero.



SECADORAS

La secadora es el electrodoméstico que más consume. Considere otras alternativas de secado antes de comprar una.
Dependiendo del sistema de calentamiento del aire, podemos encontrar secadoras eléctricas y de gas. En estas últimas el secado es hasta un 60% más barato; y energéticamente más eficiente.
Existen, además, equipos con ciclos de enfriamiento progresivo que permiten terminar de secar la ropa con el calor residual de la secadora.
Uno de los factores a tener en cuenta a la hora de comprar una secadora es conocer si en su proceso de fabricación se han utilizado elementos o materiales reciclados.
Es importante también conocer si existen líneas de reciclado y recogida para el momento en que quiera deshacerse de él.
Siempre que pueda, compre aparatos con etiquetado energético de clase A: ahorran energía y dinero.


PEQUEÑOS ELECTRODOMÉSTICOS, TELEVISORES Y EQUIPOS AUDIOVISUALES

Las tostadoras de pan de tipo cerrado pueden consumir hasta un 50% menos de energía que las que son abiertas.
Al adquirir un pequeño electrodoméstico, compre aquél cuya potencia sea suficiente para sus necesidades. Aunque no lo parezca, mientras se usan pueden tener un consumo superior al de un frigorífico (secadores de pelo, micro-ondas, aspiradoras...).
A la hora de decidir el tamaño de la pantalla de su televisor, tenga en cuenta que de ella depende la mayor parte del consumo energético del equipo.


ORDENADOR Y LA IMPRESORA

Seleccione, en función de sus necesidades, la capacidad de los equipos que compre. Por ejemplo, una pantalla grande de ordenador consume mucho más que la estándar de 12 pulgadas.
Compre equipos con sistemas de ahorro de energía "Energy Star". Esta función permite mantenerlos en un estado latente de muy bajo consumo cuando no se utilizan.
También se puede ahorrar energía y materias primas comprando ordenadores cuyos componentes sean reciclables.


SISTEMAS DE AIRE ACONDICIONADO

A la hora de comprar un equipo de aire acondicionado, tenga muy en cuenta la zona climática en la que vive, las dimensiones de la vivienda, la orientación de las paredes, el número de personas que habitan la casa, etc.
Antes de comprar, consulte a un técnico. En los establecimientos autorizados le asesorarán adecuadamente, si usted facilita los datos de su vivienda y sus necesidades.
No elija aparatos más grandes ni más potentes de lo que necesita. Estará tirando dinero y malgastando energía.
Asegúrese de que el modelo elegido tiene termostato con lectura numérica de temperatura. Un grado más de frío puede implicar un 8% más de consumo.
Uno de los factores a tener en cuenta a la hora de comprar un equipo de aire acondicionado es conocer si en su proceso de fabricación se han utilizado elementos o materiales reciclados.
Es importante también conocer si existen líneas de reciclado y recogida para el momento en que quiera deshacerse de él.
Los equipos con etiquetado energético de clase A son los más eficientes y pueden ahorrarnos mucho dinero en la factura eléctrica a lo largo de su vida útil.


ILUMINACIÓN

Compre lámparas de bajo consumo en lugar de las convencionales. Existen modelos para todas las necesidades y aplicaciones domésticas.


EL COCHE PRIVADO

A la hora de comprar un coche, es recomendable elegir un modelo que se adapte a nuestras necesidades. Para realizar desplazamientos por la ciudad, por ejemplo, no se aconseja un coche de gran potencia o tamaño, ya que implica mayor consumo, mayor emisión de gases contaminantes y mayor coste.
Cuando vaya a adquirir un coche fíjese en la etiqueta de consumo y emisiones de CO2; para las mismas prestaciones, le resultará más interesante, tanto económica como ecológicamente, comprar un coche de categoría A o B.
Para facilitar información sobre consumo y emisiones de CO2, en agosto de 2002 se aprobó el Real Decreto 837 que establece la obligatoriedad de facilitar información, a través de distintos soportes, sobre estos dos temas, en todos los turismos nuevos que se pongan a la venta o se ofrezcan en arrendamiento financiero en España.
En el punto de venta, cada modelo debe exhibir una etiqueta obligatoria, colocada de forma visible en el coche o cerca del mismo. Esta contendrá los datos oficiales de consumo de combustible y emisiones de CO2 y hará referencia al modelo y tipo de carburante.
En los puntos de venta se exhibirá un cartel para cada marca y para todos los modelos de coches nuevos disponibles con los datos oficiales relativos al consumo de carburante y a las emisiones de CO2, destacando los coches con menor consumo.
En todo el material gráfico que se utilice para la comercialización, promoción y publicidad de los vehículos, se incluirá información oficial sobre el consumo de carburante y las emisiones de CO2 de los coches a los que haga referencia.
En cada punto de venta y en Internet (http://www.idae.es/) debe existir una guía con una lista de todos los modelos de coches nuevos puestos en venta (gasolina y gasóleo), con la información de consumo de combustible y emisiones de CO2, clasificados por marca. La lista incluirá los modelos de mayor eficiencia energética, ordenados de menor a mayor emisión específica de CO2 para cada tipo de carburante.

Consejos para el consumo eficiente de Energía (3 de 7)

EN CASA, COMO AHORRAR ENERGÍA

INTRODUCCIÓN

La mayor parte de la energía que se usa en las viviendas españolas se dedica al uso de la calefacción y a la producción de agua caliente sanitaria. De hecho, ambas partidas suman el 66% del gasto energético familiar, mientras que el 34% restante se invierte en el uso de los electrodomésticos (16%) de la cocina (10%) la iluminación (7%) y el aire acondicionado (1%). En cualquier caso, la cantidad de energía que se gasta en el calentamiento de las viviendas varía mucho de unas zonas geográficas a otras. Todos sabemos, que en algunos lugares de España no se requiere apenas calefacción a lo largo del año. Así ocurre también con el resto del consumo energético: La zona climática donde se ubica nuestra vivienda, el régimen de uso que hagamos de ella, su calidad constructiva y su nivel de aislamiento, entre otros factores, condicionan nuestro gasto energético familiar. Asimismo, el coste de los diferentes sistemas y equipamientos de que dispone nuestra casa y el uso que les damos, contribuye de manera decisiva en este mismo sentido. Lo más importante, por tanto, es que tomemos conciencia de que en todos estos factores podemos tomar decisiones a favor o en contra del uso eficiente de la energía. Y, como en el año 2001 el número de primeras residencias existente en España ascendía a un total de 13,5 millones, con un consumo medio de electricidad de 3.300 kWh/año, el ahorro energético que podemos generar entre todos con un uso eficiente de los equipamientos de nuestras viviendas puede ser muy alto.


CON EL BUEN USO DEL FRIGORÍFICO

Tenga en cuenta que casi el 19% de la electricidad consumida en las viviendas españolas se destina a la refrigeración y congelación de los alimentos, por lo que su buen uso es relevante para nuestra economía familiar.
A diferencia de otros aparatos, las prestaciones del frigorífico dependen del lugar donde se ubique. Es necesario permitir la circulación de aire por la parte trasera del equipo y alejarlo de focos de calor o de la radiación solar directa.
Mantenga la parte trasera del frigorífico y el congelador limpia y ventilada. Instalados en malas condiciones, consumen hasta un 15% más.
Si se forma escarcha en el congelador, descongele antes de que la capa de hielo alcance 3 mm de espesor: podrá conseguir ahorros de hasta el 30%.
Compruebe que las gomas de las puertas están en buenas condiciones y hacen un buen cierre: evitará pérdidas de frío.
No introduzca nunca alimentos calientes en el frigorífico: si los deja enfriar fuera, ahorrará energía.
Cuando saque un alimento del congelador para consumirlo al día siguiente, descongélelo en el compartimento de refrigerados, en lugar de hacerlo en el exterior. De este modo, tendrá ganancias gratuitas de frío.
Ajuste el termostato para mantener una temperatura de 6ºC en el compartimento de refrigeración y de -18ºC en el de congelación. Cada grado que reduzca la temperatura, aumentará, innecesariamente, un 5% el consumo de energía.
Abra la puerta lo menos posible y ciérrela rápidamente: unos segundos bastan para perder buena parte del frío acumulado.


AL COCINAR

Procure que el fondo de los recipientes sea ligeramente superior al fuego o zona de cocción: aprovechará al máximo el calor de la cocina.
Habitúese a la olla a presión. Y mejor, si se trata de las super rápidas (sin apenas pérdidas de vapor durante la cocción): consumen menos energía y ahorran mucho tiempo.
Tape las cacerolas durante la cocción: consumirá menos energía.
En las cocinas eléctricas, utilice baterías de cocina con fondo grueso difusor: logrará una temperatura más homogénea en todo el recipiente.
Aproveche el calor residual de las cocinas eléctricas apagándolas unos cinco minutos antes de terminar de cocinar los alimentos. Si dispone de vitrocerámica, use el programa económico.
Tenga siempre en cuenta que utilizar el microondas en lugar del horno convencional supone un ahorro entre el 60 y 70% de energía y un ahorro considerable de tiempo.
Procure aprovechar al máximo la capacidad del horno y cocine, si es posible de una vez, el mayor número de alimentos.
Para cocciones superiores a una hora, no suele ser necesario precalentar el horno.
Evite abrir la puerta del horno innecesariamente. Cada vez que la abre se pierde, como mínimo, el 20% del calor acumulado en su interior.
Apague el horno un poco antes de finalizar su cocción: el calor residual será suficiente para acabar el proceso.
Si dispone de tiempo, descongele los alimentos dentro del propio frigorífico. Evitará el consumo de energía del horno o del microondas para descongelar.


AL FREGAR

Lave la vajilla en el lavavajillas. Lavar a mano con agua caliente puede resultar hasta un 60% más caro que hacerlo con un lavaplatos moderno a plena carga.
No ponga en marcha el lavavajillas hasta que no esté totalmente lleno. Pero no lo cargue en exceso ni superponga piezas. Probablemente tendrá que volver a lavarlas, provocando más consumo de energía.
Si necesita lavar la vajilla cuando el lavaplatos está a media carga, use los programas cortos o económicos.
Si necesita aclarar la vajilla antes de meterla en el lavaplatos, utilice agua fría.
Siempre que pueda utilice los programas económicos o de baja temperatura.


CON LA COLADA

Después del frigorífico y el televisor, la lavadora es el electrodoméstico que más energía consume.
La mayor parte de la energía que consumen (entre el 80 y el 85%) se utiliza para calentar el agua, por lo que es muy importante lavar, siempre que se pueda, con los programas de baja temperatura.
El ciclo de lavado a 90ºC consume casi el doble de energía que el de 60ºC.
Procure que su lavadora trabaje siempre a plena carga y en los programas económicos.
Limpie regularmente el filtro de la lavadora: funcionará mejor y ahorrará energía.
Si tiene contratada la tarifa nocturna, procure poner la lavadora y el mayor número posible de electrodomésticos en las horas de descuento.
La secadora es un gran consumidor de energía. Por tanto, es recomendable limitar su uso a situaciones de urgencia.
Si emplea la secadora, centrifugue previamente la colada para no hacerla trabajar más. Gastará mucha menos energía.
Aproveche al máximo la capacidad de su secadora y procure que trabaje siempre a carga completa.
No seque la ropa de algodón y la ropa pesada en las mismas cargas de secado que la ropa ligera. Estas últimas se secan antes.
Use el sensor de humedad para evitar que su ropa se seque excesivamente. Ahorrará tiempo y energía.
Periódicamente limpie el filtro de la secadora e inspeccione el orificio de ventilación para asegurarse de que no está obstruido. Mejorará su rendimiento.


CON LAS BASURAS DOMÉSTICAS

Cada español genera diariamente una media de 1,7 kilos de residuos domésticos, lo que representa un total de 620 kilos de basura por habitante y año.
Los residuos son una fuente potencial de energía y materias primas que puede aprovecharse en los ciclos productivos. De hecho, más del 65% de toda la basura que se genera en España es recuperable o reciclable.
Los residuos orgánicos se pueden recuperar principalmente como abono o compost.
El papel y el cartón también se reciclan fácilmente. De hecho, en España, se reciclan cada año más de dos millones y medio de toneladas de papel, aunque una cantidad similar se envía a vertederos o incineradoras.
Cada tonelada de papel que se recicla evita que se corten 14 árboles, se consuman 50.000 litros de agua y más de 300 Kg. de petróleo.
Hay que tener en cuenta que algunos tipos de papel, como los plastificados, los adhesivos, los encerados, los de fax y los autocopiativos, no pueden reciclarse.
Además de la tala de árboles, el reciclado de papel disminuye el consumo de agua del sector papelero en un 86% y el de energía en un 65%.
El vidrio es reciclable al 100%. Por cada botella que se recicla se ahorra la energía necesaria para tener un televisor encendido durante 3 horas o la energía que necesitan 5 lámparas de bajo consumo de 20 W durante 4 horas.
Reciclando las 3.000 botellas que caben en un "iglú" de recogida selectiva se ahorran del orden de 130 kg de petróleo y 1.200 kg de materias primas.
El reciclaje de plásticos, sin embargo, es complejo. Además, todos los plásticos se fabrican a partir del petróleo. Por ello, al consumir plásticos, se contribuye al agotamiento de un recurso no renovable.
Los plásticos tardan mucho en degradarse, y si se opta por incinerarlos se emiten a la atmósfera, además de CO2, contaminantes muy peligrosos para la salud y el medio ambiente.
Por ello, rechace las bolsas de plástico que no necesite. Procure llevar siempre su propia bolsa de la compra.
Ponga mucha atención a la hora de adquirir productos de los llamados de "usar y tirar"; piense si le resultan verdaderamente imprescindibles.
La fabricación del aluminio es uno de los procesos industriales de mayor consumo energético y de mayor impacto ambiental. Modere la utilización de papel de aluminio y plástico para envolver.
Tenga en cuenta que con la energía necesaria para fabricar una lata de refresco de aluminio, se podría tener funcionando un televisor durante dos horas.
Recuerde que los briks se fabrican a partir de finas capas de celulosa, aluminio y plástico que son muy difíciles de separar, lo que dificulta enormemente su reciclado.
Prefiera siempre un envase de vidrio a uno de metal; y uno de papel a uno de plástico.
La pilas, algunas de las cuales tienen en su composición componentes peligrosos, sobre todo si entran en contacto con el agua, deben tener un tratamiento diferenciado y una recogida y confinamiento específicos para que no produzcan deterioros medioambientales ni afecten a la salud humana.
Los productos de limpieza, desinfectantes, medicamentos, aceites usados, etc., muy habituales en las viviendas son materiales tóxicos, por lo que no deben tirarse al fregadero ni al cubo de la basura. Ya existen en muchas ciudades servicios específicos de recogida de este tipo de residuos. Infórmese.
Aproveche todas las posibilidades que ofrezca su municipio para la recogida selectiva de basuras, depositándolas en los contenedores especiales. Exija la presencia de contenedores si todavía no han llegado a su barrio.
La clave para abordar, de forma sistemática, el problema de las basuras desde nuestra casa, se basa en las famosas "Tres R": "Reducir", "Reutilizar", "Reciclar", adoptadas también por la Unión Europea en sus documentos oficiales.
REDUCIR las basuras: consiste en rechazar los distintos tipos de envases o empaquetados cuando éstos no cumplan una función imprescindible desde el punto de vista de la conservación, de la facilidad para el traslado o para el consumo.
Los envases familiares son preferibles a los envases individuales; deberían evitarse, así mismo, los envases duplicados: los tubos que luego vienen envueltos en cajas, las bandejas de plástico recubiertas de cartón, etc.
REUTILIZAR los productos antes de que se conviertan en residuos, consiste en sacarles todo su partido; en primer lugar en nuestras casas o, si no, retornándolos al circuito comercial en el que los hemos adquirido.
La utilización de pilas recargables, en aquellos equipos que lo permitan, es otra buena forma de reutilización de productos. Siempre que pueda opte por un reloj, calculadora o aparato que, o bien no funcione con pilas, o que utilice pilas recargables.
La bolsa de plástico que traemos de la compra la podemos reutilizar como bolsa de la basura.
RECICLAR las basuras: consiste en devolver al ciclo productivo los materiales presentes en los residuos para que, después de un tratamiento, puedan incorporarse al mismo proceso.
Al vertedero o a la incineradora sólo deberían ir aquellos desechos o productos de los que ya no se puede extraer nada aprovechable.
El contenedor naranja debe usarse para depositar la basura de carácter orgánico.
El contenedor amarillo está concebido para depositar los envases del tipo Tetra-Brick, botellas de plástico y botes metálicos.
EL contenedor azul es aquél en el que debemos depositar el papel y los cartones.
En el contenedor verde deben depositarse los envases de vidrio.


EN EL CUARTO DE BAÑO

El ahorro de agua, aunque no se trate de agua caliente, conlleva un ahorro energético, ya que el agua es impulsada hacia nuestras viviendas mediante bombas eléctricas, que consumen energía.
Racionalice el consumo de agua. No deje los grifos abiertos inútilmente (en el lavado, en el afeitado, en el cepillado de dientes).
Recuerde que una ducha consume del orden de cuatro veces menos agua y energía que un baño.
Además, existen en el mercado cabezales de ducha de bajo consumo que permiten un aseo cómodo, gastando la mitad de agua y, por tanto, de energía.
Tenga también en cuenta que en los grifos se pueden colocar reductores de caudal (aireadores).
Evite goteos y fugas de los grifos. El simple goteo del grifo del lavabo significa una pérdida de 100 litros de agua al mes.
Si en su cuarto de baño todavía tiene grifos independientes para el agua caliente y el agua fría, cámbielos por un único grifo de mezcla (monomando).
Recuerde que una temperatura entre 30º y 35ºC es más que suficiente para tener una sensación de comodidad a la hora de la higiene.
Los reguladores de temperatura con termostato, principalmente para la ducha, pueden ahorrar entre un 4% y un 6% de energía.
Calentar el agua con gas en lugar de hacerlo con electricidad, evita que cada familia emita a la atmósfera, como media, hasta media tonelada de CO2 al año.
Si tiene un termo eléctrico, instale un reloj programador que permita conectarlo sólo cuando se necesite agua caliente.
Los sistemas de doble pulsador o de descarga parcial para la cisterna del inodoro ahorran una gran cantidad de agua.


CON LOS SISTEMAS DE CALEFACCIÓN

Entre el 25% y el 30% de nuestras necesidades de calefacción son debidas a las pérdidas de calor que se originan en las ventanas. Revise y mejore sus aislamientos en caso de que detecte deficiencias en los mismos.
Aunque la sensación de confort sea subjetiva, se puede asegurar que, en invierno, una temperatura de entre 19ºC y 21ºC es suficiente para la mayoría de personas. Por la noche, basta tener una temperatura de 15ºC a 17ºC para sentirnos bien.
En condiciones normales, es suficiente encender la calefacción por la mañana. Por la noche, salvo en zonas muy frías, se debe apagar la calefacción, ya que el calor acumulado en la vivienda suele ser más que suficiente (sobre todo si se cierran persianas y cortinas).
La temperatura a la que programamos la calefacción condiciona el consumo de energía de nuestro sistema de calefacción. Por cada grado que aumentemos la temperatura, se incrementa el consumo de energía aproximadamente en un 7%.
Si se ausenta por unas horas, reduzca la posición del termostato a 15ºC (la posición "economía" de algunos modelos corresponde a esta temperatura).
Si tiene habitaciones vacías o que se usen poco, la temperatura se puede bajar; o incluso se puede cerrar la válvula del radiador o apagar el equipo calefactor.
Apague completamente la calefacción si va a dejar desocupada la vivienda más de un día.
Las calderas deben someterse a revisiones periódicas. Es aconsejable una revisión anual al inicio de la temporada de calefacción. Una caldera sucia tiene dificultades para la combustión y, por tanto, consume más.
No espere a que se estropee el equipo: un mantenimiento adecuado de su caldera individual le ahorrará hasta un 15% de energía, lo que representa más de 100 euros anuales en combustible.
El aire contenido en el interior de los radiadores dificulta la transmisión de calor. Es conveniente purgarlo al menos una vez al año, al inicio de la temporada de calefacción. En el momento que deje de salir aire y comience a salir sólo agua, habrá terminado la purga.
Si sustituye los radiadores eléctricos por acumuladores de calor o bomba de calor puede rebajar sustancialmente su gasto en electricidad.
Por motivos de confort, la mejor colocación de los radiadores, es debajo de las ventanas, haciendo coincidir la longitud del radiador con la de la ventana, para favorecer la correcta difusión del aire caliente por la habitación.
Es conveniente no tapar ni obstruir los radiadores para aprovechar al máximo el calor que emiten. En el caso de que estén situados en huecos u hornacinas, es importante colocar elementos reflectantes detrás de los mismos.
Para ventilar completamente una habitación es suficiente con abrir las ventanas alrededor de 10 minutos: no se necesita más tiempo para renovar el aire y se malgasta energía.
La calefacción central colectiva, con medición y regulación individualizadas para cada una de las viviendas es, desde el punto de vista energético y económico, un sistema mucho más eficiente y barato que los sistemas individuales o independientes.
La ventaja de la bomba de calor con respecto a otros sistemas eléctricos es su alta eficiencia: por cada kWh de energía consumida se transfiere entre 2 y 4 kWh de calor. Además, la bomba de calor no sólo permite calentar la vivienda sino también enfriarla.
Es muy importante disponer de un sistema de regulación de la calefacción que adapte las temperaturas de la vivienda a nuestras necesidades. Los termostatos programadores son soluciones accesibles, fáciles de colocar y que pueden amortizarse rápidamente por los importantes ahorros de energía que generan (entre un 8 y un 13%).
Para los sistemas de caldera y radiadores de agua caliente, un procedimiento sencillo para mantener la temperatura deseada en cada una de las habitaciones consiste en la instalación de válvulas termostáticas sobre los propios radiadores.
Para aquellos casos en los que la vivienda esté vacía durante un número de horas elevado, es interesante considerar la sustitución del termostato normal por otro programable, en el que se pueden fijar las temperaturas en diferentes franjas horarias e incluso para fines de semana o días especiales.
También existen en el mercado sistemas de control y regulación centralizados, conocidos como sistemas domóticos. Estos sistemas permiten diferenciar distintas zonas, registrar y dar la señal de aviso en caso de averías y también integrar funciones de seguridad contra robo, de confort y manejo de equipos, incluso a distancia.
En general, los sistemas eléctricos de calefacción y producción de agua caliente sanitaria no son recomendables desde el punto de vista energético. Dentro de las variantes de calefacción eléctrica, los sistemas más adecuados son la bomba de calor y la acumulación con tarifa nocturna; y los menos, los elementos individuales (radiadores eléctricos, convectores, etc.) distribuidos por las habitaciones.


CON EL AIRE ACONDICIONADO

Es importante dejarse aconsejar por un profesional cualificado sobre el tipo de equipamiento y potencia que mejor responda a nuestras necesidades de frío y de calor, en función de las características de las habitaciones a climatizar.
Hay que tener en cuenta que, para el mismo nivel de prestaciones, hay aparatos que consumen hasta un 60% más de electricidad que otros.
Es importante colocar los aparatos de refrigeración de tal modo que les dé el sol lo menos posible y haya una buena circulación de aire. En el caso de que las unidades condensadoras estén en un tejado, es conveniente colocar un sistema de ensombramiento.
Cuando encienda el aparato de aire acondicionado, no ajuste el termostato a una temperatura más baja de lo normal: no enfriará la casa más rápido y podría resultar excesivo y, por tanto, un gasto innecesario.
Desconecte el acondicionador cuando no haya nadie en la casa o en la habitación que esté refrigerando.
Cerrar persianas y correr cortinas son sistemas eficaces para reducir el calentamiento de nuestra vivienda en verano y para evitar que se escape el calor en invierno.
Recuerde que los colores claros en techos y paredes exteriores reflejan el sol y, por tanto, evitan el calentamiento de los espacios interiores.
Con la instalación de toldos y acristalamientos adecuados, así como aislando adecuadamente los muros y techos, se pueden conseguir ahorros de energía en el uso del aire acondicionado superiores al 30%.
Existen láminas adhesivas transparentes que, pegadas en el exterior de los acristalamientos, disminuyen el flujo de calor hacia el interior de la vivienda.
La adaptación del cuerpo a las condiciones climáticas del verano y el hecho de llevar menos ropa y más ligera, hacen que una temperatura de 25ºC, en esta época, sea más que suficiente para sentirse cómodo en el interior de una vivienda. En cualquier caso, una diferencia de temperatura con el exterior superior a 12ºC no es saludable.
En verano, ventile la casa cuando el aire de la calle sea más fresco (primeras horas de la mañana y durante la noche).
Un ventilador, preferentemente de techo, puede ser suficiente para mantener un adecuado confort.
El mantenimiento adecuado y la limpieza de los equipos prolongan su vida y ahorra energía.


CON LA ILUMINACIÓN

Siempre que sea posible, aproveche la iluminación de la luz del sol, que es más natural, menos contaminante y, además, gratuita.
Utilice colores claros en las paredes y techos: aprovechará mejor la iluminación natural y podrá reducir el alumbrado artificial.
Es necesario analizar las necesidades de luz en cada una de las partes de la vivienda, ya que no todos los espacios requieren la misma cantidad, ni durante el mismo tiempo, ni con la misma intensidad.
Regule la iluminación a sus necesidades y dé preferencia a la iluminación localizada: además de ahorrar conseguirá ambientes más confortables.
No deje luces encendidas en habitaciones que no esté utilizando, reduzca al mínimo la iluminación ornamental en exteriores: jardines, etc. y coloque puntos de luz de manera que iluminen otras habitaciones colindantes, como vestíbulos y pasillos.
Mantenga limpias las lámparas y las pantallas, aumentará la luminosidad sin aumentar la potencia.
Recuerde que la eficacia luminosa de una lámpara es la cantidad de luz emitida por unidad de potencia eléctrica (W) consumida. Se mide en lúmenes por vatio y permite comparar la eficiencia de unas fuentes de luz con respecto a otras.
La eficacia luminosa de las bombillas incandescentes se sitúa entre los 12 lúmenes/vatio y los 20 lúmenes/vatio, mientras que para las lámparas fluorescentes va desde los 40 lúmenes/vatio a los 100 lúmenes/vatio.
Las bombillas incandescentes sólo aprovechan en iluminación un 5% de la energía eléctrica que consumen, el 95% restante se transforma en calor, sin radiación luminosa. Sin embargo, las lámparas de bajo consumo se encienden instantáneamente y apenas desprenden calor.
Sustituya las bombillas incandescentes por lámparas de bajo consumo. Para un mismo nivel de iluminación, ahorran hasta un 80% de energía y duran 8 veces más. Cambie, con prioridad, las que más tiempo están encendidas.
En ubicaciones con encendidos y apagados frecuentes es recomendable poner lámparas del tipo electrónico, en vez de las de bajo consumo convencionales, ya que éstas ven reducida de manera importante su vida útil con el número de encendidos.
Use tubos fluorescentes donde necesite más luz y esté encendida muchas horas; por ejemplo, en la cocina.


CON UN BUEN AISLAMIENTO

Una vivienda mal aislada necesita más energía: en invierno se enfría rápidamente y puede tener condensaciones en el interior; y en verano se calienta más y en menos tiempo.
Pequeñas mejoras en el aislamiento, pueden conllevar ahorros energéticos y económicos de hasta un 30% en calefacción y/o aire acondicionado.
Solemos asociar los aislamientos a los muros exteriores de las viviendas; sin embargo, también son necesarios los aislamientos en otras zonas del edificio contiguas a espacios no climatizados.
Un buen aislamiento de los muros que separan viviendas contiguas, además de disminuir el ruido, evita pérdidas de calor. La instalación en paredes y techo de una capa de 3 cm de corcho, fibra de vidrio o poliuretano tiene la misma capacidad aislante que un muro de piedra de un metro de espesor.
La cubierta supone la mayor superficie de intercambio de calor entre el interior y el exterior de un edificio: es por donde se pierde o gana más calor, si no está bien aislada.
El aislamiento térmico de una ventana depende de la calidad del vidrio y del tipo de carpintería del marco. Durante el invierno, a través de un cristal simple se pierde, por cada metro cuadrado de superficie, la energía contenida en 12kg de gasóleo.
Los sistemas de doble cristal o doble ventana reducen, prácticamente a la mitad, la pérdida de calor con respecto al acristalamiento sencillo y, además, disminuyen las corrientes de aire, la condensación de agua y la formación de escarcha.
En cuanto al tipo de carpintería, son de destacar las denominadas de rotura de puente térmico, que contienen material aislante entre la parte interna y externa del marco.
Procure que los cajetines de sus persianas no tengan rendijas y estén convenientemente aislados: ahorrará energía.
Para tapar las rendijas y disminuir las infiltraciones de aire de puertas y ventanas, puede emplear medios sencillos y baratos como la silicona, la masilla o el burlete. Ahorrará entre un 5% y un 10% de energía.
Utilice láminas adhesivas de material plástico transparente para pegarlas a marcos y acristalamientos. Así conseguirá disminuir de forma considerable las pérdidas de calor (si se colocan en el interior) o las ganancias (si se colocan en el exterior).
Si tiene chimenea, cierre el tiro de la misma cuando no la esté usando.

Consejos para el consumo eficiente de Energía (4 de 7)

EN EL TRANSPORTE, COMO AHORRAR ENERGÍA


INTRODUCCIÓN

El desarrollo social y económico ha propiciado, en todo el mundo, un aumento muy importante de la movilidad de las personas que, en general, ha contribuido a la mejora de nuestra calidad de vida. Pero este crecimiento ha aumentado también nuestra dependencia de los derivados del petróleo y está produciendo graves problemas de contaminación ambiental. Además, existe un fuerte desequilibrio en la participación de los diferentes modos de transporte en la movilidad total, con un dominio absoluto del transporte por carretera. Y dentro del mismo, toma cada vez mayor protagonismo el vehículo privado. De hecho, las familias españolas consumen un 15% de la energía generada en España en el uso del coche privado. Lo que, a su vez, supone un 50% de todo el consumo en energía utilizado en transporte por carretera en nuestro país. Hay que resaltar, por otro lado, las grandes diferencias que existen entre un medio de transporte y otro. En viajes interurbanos, el coche consume, por viajero-kilómetro, hasta 3 veces más que los medios de transporte colectivo (tren y autocar). Y en el medio urbano, el transporte público es hasta 6 veces más eficiente que los turismos. Además, no existen actualmente tecnologías viables capaces de limitar la emisión de ' que provoca el uso de los combustibles fósiles. Y el importante desarrollo tecnológico de las últimas décadas, que ha permitido reducir considerablemente el consumo de combustible de los coches, -en la actualidad, los automóviles consumen cerca de un 25% menos que hace 20 años-, queda anulado por la tendencia actual de comprar coches cada vez de mayor tamaño y potencia; y de recorrer con ellos más kilómetros. Así las cosas, los ciudadanos debemos tomar conciencia de la importancia que tiene utilizar más los medios de transporte más eficientes (tren y autobús para viajes interurbanos y transporte público en medio urbano), a la vez que saber que, en caso de utilizar nuestro coche privado, podemos conseguir grandes ahorros de energía y de emisiones contaminantes, con un cambio de hábitos en la conducción.



EL USO EFICIENTE DEL COCHE PROPIO

Con la conducción eficiente, además de una mejora del confort, un aumento de la seguridad vial y una disminución del tiempo de viaje, conseguiremos un ahorro medio de carburante y de emisiones de CO2 del 15%, así como una reducción del coste de mantenimiento del coche.
En los motores de gasolina, inicie la marcha inmediatamente después del arranque.
En los motores diesel, espere unos tres segundos antes de comenzar la marcha.
Comience a circular inmediatamente después de arrancar el motor. Esperar parado con el motor en marcha consume energía y no aporta ninguna ventaja.
Recuerde que la primera marcha sólo se usa para arrancar el coche. Cambie a segunda a los dos segundos o una vez recorridos seis metros, aproximadamente.
La forma más eficiente de conducir es hacerlo en las marchas más largas y a bajas revoluciones. También en ciudad, aunque respetando siempre los límites de velocidad.
En los motores de gasolina la aceleración y el cambio de marcha se debe realizar cuando se han alcanzado las 2.000 - 2.500 rpm. En los motores diesel, cuando se está entre las 1.500 y 2.000 rpm.
Según la velocidad, cambiaremos de segunda a tercera a partir de los 30 km/h; de tercera a cuarta, a partir de los 40 km/h y a quinta cuando circulemos por encima de los 50 km/h. Después de cambiar, es importante acelerar ligeramente.
Mantener la velocidad de circulación lo más uniforme posible y evitar frenazos, aceleraciones, y cambios de marchas innecesarios ahorra energía.
Para desacelerar, levante el pie del acelerador y deje rodar el vehículo con la marcha engranada en este instante. Si fuera necesario, frene de forma suave y progresiva con el pedal de freno, reduciendo la marcha lo más tarde posible.
Siempre que la velocidad y el espacio lo permitan, detenga el coche sin reducir previamente de marcha.
En paradas prolongadas, es decir, de más de 60 segundos, es recomendable apagar el motor.
Conducir siempre con una adecuada distancia de seguridad y un amplio campo de visión que permita ver 2 ó 3 coches por delante, además de aportarle seguridad vial, le permite anticiparse a las posibles frenadas, que serán más suaves.
En el momento que detecte un obstáculo o una reducción de la velocidad de circulación en la vía, levante el pie del acelerador para anticipar las siguientes maniobras.
¡Circulando a más de 20 km/h con una marcha engranada, si no pisa el acelerador, el consumo de carburante es nulo! En cambio, al ralentí, el coche consume entre 0,4 y 0,9 litros/hora.
Tenga en cuenta que ¡Un sólo coche a 4.000 rpm hace el mismo ruido que 32 coches a 2.000 rpm!


OTROS CONSEJOS PARA AUTOMÓVILES

Modere su velocidad: además de ser clave para mejorar la seguridad en las carreteras, al conducir a velocidades superiores a los 100 km/h el consumo de carburante se multiplica.
El mantenimiento del vehículo influye en el consumo de carburante. Realice las revisiones periódicas establecidas por el fabricante para su modelo de automóvil: ahorrará energía y mejorará su seguridad.
Es especialmente importante vigilar el buen estado del motor, el control de niveles y filtros y, sobre todo, la presión de los neumáticos. Consumirá menos y aumentará su seguridad.
Los accesorios exteriores aumentan la resistencia del vehículo y, por consiguiente, incrementan el consumo de carburante. No es recomendable transportar objetos en el exterior del vehículo, si no es estrictamente necesario.
Conducir con las ventanillas bajadas también provoca mayor resistencia y, por lo tanto, mayor esfuerzo del motor y mayor consumo. Si necesita ventilar el coche, lo más recomendable es utilizar de manera adecuada la circulación forzada de aire.
Como el uso de equipos auxiliares, y muy especialmente el aire acondicionado, aumenta significativamente el consumo de carburante, es recomendable utilizarlos con moderación.
Recuerde que una temperatura en torno a 23ºC-24ºC es suficiente para conseguir una sensación de bienestar dentro del coche.


EL TRANSPORTE PÚBLICO EN LAS CIUDADES

El coche es la principal fuente de contaminación de nuestras ciudades: de emisión de ruido y de la mayor parte de las emisiones de CO y de los hidrocarburos no quemados.
En la ciudad, el 50% de los viajes en coche es de menos de 3 km, y un 10% de menos de 500 m. En estas ocasiones, valore la opción de usar el transporte público.
Para pequeños desplazamientos dentro de la ciudad considere la posibilidad de ir a pie o en bicicleta. Además de ahorrar energía y no contaminar, es más saludable.


EL AHORRO DE ENERGÍA EN EL TRANSPORTE DE MERCANCÍAS

Antes de salir, planifique la ruta a seguir: hará menos kilómetros y consumirá menos combustible.
Prever, ver de lejos, guardar las distancias de seguridad, conducir con anticipación y tranquilidad son la mejor garantía de seguridad y ahorro energético.
Conducir de modo uniforme, evitando variaciones bruscas de velocidad y manteniendo el motor funcionando dentro de la zona central del cuentarrevoluciones, es más confortable y ahorra energía.
Si el tráfico lo permite, la mejor manera de ahorrar combustible es conducir en marchas largas.
Después de arrancar, circule haciendo trabajar el motor suavemente hasta que haya alcanzado su temperatura normal de funcionamiento. Y no de acelerones antes de parar el motor.
No acelere el motor en frío innecesariamente. La consecuencia es un elevado desgaste del motor y un gran consumo de combustible.
Recuerde que realizar el doble embrague cuando no es necesario supone malgastar embrague y combustible.
Sepa que cuanto menor es el régimen de giro del motor, menores serán las pérdidas por fricción, lo que se traducirá en menor consumo.

Consejos para el consumo eficiente de Energía (5 de 7)

EN EL PUESTO DE TRABAJO, COMO AHORRAR ENERGÍA

INTRODUCCIÓN

El lugar donde desarrollamos nuestro trabajo, después de nuestra casa, es el sitio donde más tiempo pasamos a lo largo del día. Por este motivo, y teniendo en cuenta la cantidad y calidad del equipamiento y los servicios que la mayoría de las empresas españolas ofrece, se convierte en un lugar muy apropiado para aplicar buenas prácticas en el uso de la energía. Si bien el lugar y el tipo de trabajo son muy diferentes de unas áreas de actividad a otras, la realidad es que existen determinados equipos y servicios, consumidores de energía, muy similares en todas las empresas. Estos equipamientos y servicios pueden y deben utilizarse de un modo eficiente. Para ello, lo primero que hemos de hacer es informarnos y tomar conciencia de cómo podemos utilizarlos de manera energéticamente más eficiente. A continuación, nos corresponderá actuar en el terreno que sea de nuestra competencia con decisiones personales; o bien proponer a la dirección y promover, a través del Comité de Empresa, mejoras en todo aquello que no sea de nuestra responsabilidad directa.


CÓMO AHORRAR EN EL TRANSPORTE AL LUGAR DE TRABAJO

Más del 80% de los desplazamientos en día laborable son para ir al trabajo. Por ello es muy importante promover el uso compartido del coche, aún entre usuarios de diferentes empresas, pero con necesidades de desplazamientos diarios compatibles, tanto por ruta como por horario.
Proponga a la dirección de su empresa, contando con la participación de los representantes de los trabajadores, la implantación de un plan de transporte para todos los empleados.


CÓMO AHORRAR EN EL USO DEL PAPEL

Siempre que pueda, utilice el correo electrónico y la intranet de su empresa para enviar y recibir información sin necesidad de utilizar el papel.
Reutilice las caras en blanco de los documentos impresos para tomar notas, imprimir borradores de documentos, etc.
Fotocopie e imprima a doble cara. Ya existen en el mercado impresoras que lo permiten.
Revise los textos en su Pc antes de imprimirlos. Una buena opción es pasar el corrector ortográfico, si no lo tiene activado.
Reutilice los sobres para envíos internos.
Utilice pizarras de tiza o de rotuladores, en lugar de las que usan recambios de papel.
Promueva la adquisición de papel reciclado y sin blanquear con cloro para impresos, sobres, cartas, cuadernos, etc.
Promueva la compra de faxes que utilicen papel normal y no papel térmico. Tenga en cuenta que si bien el papel normal, si no está sucio, es un residuo que se recicla fácilmente, los papeles plastificados, los térmicos para faxes y los autocopiativos no se pueden reciclar.
Active sistemas de separación de los residuos de papel del resto de la basura, utilizando a continuación los canales de recogida habituales para reciclado.


CÓMO AHORRAR CON LOS EQUIPOS OFIMÁTICOS

Cuando no vaya a usar sus equipos ofimáticos durante un tiempo prolongado -media hora o más- no olvide que la mejor forma de ahorrar energía es apagarlos.
Para pausas cortas desconecte la pantalla de su Pc, que es la responsable de la mayor parte del consumo energético. Ahorrará energía y evitará tener que reiniciar todo el equipo.
Si sustituye el ordenador antiguo por otro nuevo, quizás sea posible aprovechar determinadas piezas del equipo, como por ejemplo el monitor o el teclado.


CÓMO AHORRAR CON LA ILUMINACIÓN Y LOS ASCENSORES

No encienda las luces si no es estrictamente necesario: aproveche la zonificación (encendido y apagado por zonas) de la iluminación y, siempre que sea posible, deje de encender por el día las luminarias situadas en zonas cercanas a ventanas y acristalamientos.
Recuerde que en zonas de paso y acceso, los detectores de presencia que activan la iluminación, pueden producir ahorros importantes de energía.
Promueva la limpieza periódica de las luminarias, mejorará la calidad de la iluminación y ahorrará energía.
Incentive a los servicios de limpieza o a los últimos en abandonar las oficinas a que apaguen o den aviso para que se apaguen las luces, cuando terminen sus tareas.
Instale lámparas de bajo consumo y recuerde que los sistemas de iluminación electrónicos son más eficientes que los convencionales.
Entre plantas contiguas, procure subir o bajar andando, en vez de utilizar el ascensor.


OTROS CONSEJOS PARA AHORRAR ENERGÍA EN EL PUESTO DE TRABAJO

Promueva la separación de residuos y su envío a los canales de recogida para su reciclado y valorización.
Promueva el reciclado de los cartuchos de tóner de las fotocopiadoras e impresoras; contienen como pigmento "negro de carbón", que se puede considerar un residuo peligroso.
Proponga la compra de elementos recargables y material de oficina reutilizable (cartuchos de tinta de las impresoras, etc.). Y evite el consumo de productos de un solo uso: vasos y menaje de plástico, bolígrafos,...
Incentive el uso de calculadoras solares (con células fotoeléctricas).
Incentive el mantenimiento preventivo de los equipos para garantizar su adecuado funcionamiento y la reducción de los consumibles (tinta, tóner, papel, etc.).
Procure que no se dejen puertas o ventanas abiertas innecesariamente y no malgaste agua.
Realice un mantenimiento preventivo y regular de las instalaciones de calefacción y refrigeración.
Programe los termostatos del aire acondicionado a las temperaturas recomendadas (25ºC en verano).
Utilice adecuadamente los sistemas de calefacción, adecuando las temperaturas al tipo de actividad que se realice y al uso que se hagan de los distintos espacios (zonas de paso, zonas de trabajo, sala de espera...).

Consejos para el consumo eficiente de Energía (6 de 7)

EN LA COMUNIDAD DE VECINOS, COMO AHORRAR ENERGÍA

INTRODUCCIÓN

Al comprar una vivienda adquirimos, con ella, una serie de equipamientos comunes al edificio o conjunto de edificios, que son los que nos proporcionan los servicios necesarios para hacer habitable nuestro hogar. Estos suelen ser la calefacción y el agua caliente centrales, la iluminación de espacios comunes, los ascensores, etc. cuyos consumos de energía son importantes y cuyos gastos se comparten entre los propietarios. Aunque la propiedad sea colectiva, todos los co-propietarios del edificio o edificios que forman la comunidad, tienen oportunidad de hacer oír su opinión y fomentar medidas de eficiencia energética. No en balde, las instalaciones comunes se financian con las cuotas individuales de todos los propietarios. Por ello, es fundamental que conozcamos la manera en que el administrador y todos los vecinos de la finca pueden contribuir al uso eficiente de la energía que se consume en la misma, así como las disposiciones legales que deben aplicarse en el ámbito de la comunidad de propietarios.


Con la calefacción

Un adecuado mantenimiento de la instalación es un factor determinante para conseguir ahorro y eficiencia energética. Tenga en cuenta que para su seguridad, el mantenimiento siempre deben realizarlo técnicos profesionales.
La legislación actual (Reglamento de Instalaciones Técnicas -RITE) exige que las instalaciones individuales tengan un termostato y que las colectivas de caldera central tengan un sistema de regulación. Los sistemas con centralita de regulación consiguen ahorros importantes con respecto a las instalaciones que no la tienen.
Recuerde que la suma de un buen mantenimiento y un buen sistema de regulación permite, en los servicios comunes, ahorros totales de energía superiores al 20%.
Es muy frecuente que los vecinos de pisos altos no consigan caldear sus viviendas, mientras que los habitantes de los pisos bajos sufren un exceso de calor. Estas diferencias se deben a la existencia de un desequilibrio hidráulico de la red de tuberías de agua caliente. Póngase en manos de técnicos profesionales para que le solucionen el problema.
Aunque no es frecuente que la zona de portal, pasillos y vestíbulos estén calefactados, es recomendable instalar una doble puerta en el portal y mecanismos de cierre automático para las puertas que den al exterior, de esta forma evitaremos que se queden abiertas involuntariamente.
Las ventanas de las escaleras no deben dejarse abiertas más que el tiempo que requiera la ventilación de las zonas adyacentes.
Por la noche, exceptuando en localidades muy frías, es aconsejable apagar la calefacción hasta la mañana siguiente.
A la hora de elegir la caldera es importante saber que las calderas con 4 estrellas son las que tienen mejor rendimiento.
Las calderas de condensación y las de baja temperatura, a pesar de ser más caras que las convencionales (hasta el doble de precio), pueden procurar ahorros de energía superiores al 25%, por lo que el sobrecoste se puede recuperar en un periodo de 5 a 8 años; es decir, en menos de la mitad de la vida útil de un equipo de estas características.
Para el caso de instalaciones con caldera con un silo para el almacenamiento del combustible y un acceso para la carga y descarga del mismo, una opción muy interesante a considerar es la de sustituir la caldera por otra de biomasa, o la adaptación de la antigua caldera de carbón mediante la instalación de quemadores para biomasa.
Más del 10% de la energía total puede perderse a través de las tuberías de distribución, si no están aisladas correctamente. Para evitar estas pérdidas es importante aislar todas las tuberías que discurran por espacios no calefactados (sala de calderas, garajes, falsos techos, patinillos, etc.).
Recuerde que la calefacción, junto con el agua caliente sanitaria pueden suponer más del 60% de los gastos de una comunidad de vecinos.


Con el agua caliente sanitaria

Un buen mantenimiento es esencial para el correcto funcionamiento de estas instalaciones, evitando así el despilfarro energético. Los servicios de agua caliente centrales constituyen instalaciones complejas cuyo mantenimiento debe llevarse a cabo por técnicos technicians.
Es muy importante evitar las pérdidas de calor por las tuberías de agua caliente, para lo cual es necesario que estén convenientemente aisladas y que los puntos de consumo estén lo más cerca posible de la caldera.
Es recomendable, además, instalar un reloj programador para evitar que funcione la recirculación de agua caliente por la noche y conseguir así un ahorro nada despreciable en el gasto eléctrico.
Los sistemas instantáneos para la producción de agua caliente exigen continuos arranques y paradas de la caldera que conllevan un coste energético mayor que los sistemas con acumulación.
En los sistemas con acumulación, debido a que las potencias requeridas para la preparación del agua caliente suelen ser muy inferiores a las que se necesitan para calefacción, es recomendable el empleo de calderas independientes para la producción de cada una de ellas.
Cuando la caldera sea del tipo condensación o de baja temperatura, cuyos rendimientos no decrecen cuando no funcionan a plena carga, se podría considerar instalar una sola caldera para la calefacción y la producción de agua caliente. Además, la potencia de la caldera podrá ser inferior a la suma de la potencia de calefacción más la de producción de agua caliente, ya que es muy improbable que se demanden simultáneamente ambos servicios a la máxima potencia.
La energía solar térmica supone una opción muy interesante para la producción de agua caliente sanitaria. Estas instalaciones se dimensionan generalmente para proporcionar a las viviendas entre el 50% y el 70% del agua caliente demandada y la inversión necesaria se puede amortizar en menos de la mitad de la vida útil de los equipos.


Con la factura eléctrica

En algunas comunidades de propietarios existe más de un suministro eléctrico. En estos casos, es recomendable unificar los suministros para conseguir un importante ahorro económico.
Es conveniente, además, que un especialista revise la contratación eléctrica: es posible que la potencia contratada sea mayor de la necesaria o que la tarifa contratada no sea la más adecuada. En muchos casos, las tarifas que bonifican consumos nocturnos y en horas valle son más económicas.
En el caso de tarifas con discriminación horaria, es importante estudiar la factura eléctrica y observar si la compañía está penalizando a la comunidad de vecinos por no tener compensada la energía reactiva. Los recargos por este concepto pueden llegar al 47% y, sin embargo, con una compensación adecuada del factor de potencia, se pueden obtener bonificaciones de hasta el 4%.


Con la iluminación

La sectorización, los sistemas de temporización y los detectores de presencia, unidos a la utilización de lámparas de bajo consumo y tubos fluorescentes pueden reducir en más del 75% el gasto en iluminación.
En zonas de paso, como portales, escaleras o vestíbulos, es conveniente usar sistemas de temporización, para que las luces se apaguen una vez transcurrido un periodo prefijado.
Una buena idea es sectorizar los interruptores de las luces de escaleras, vestíbulos, garajes y zonas comunes para evitar que se enciendan a la vez; y promover la instalación de sensores de presencia para que éstas se enciendan realmente cuando se necesiten.
La elección de las luminarias también es muy importante: cuanto mejor reflejen y distribuyan la luz, menos potencia será necesario instalar. Las de aluminio del tipo especular son las de mejor rendimiento, aunque para que no pierdan eficacia necesitan limpieza periódica.
Recuerde que sustituir las lámparas incandescentes por otras de bajo consumo y/o tubos fluorescentes contribuirá al ahorro en la factura eléctrica.
Las lámparas de inducción, dependiendo de si son estándar o compactas, pueden tener una vida útil que varía de las 40.000 a las 100.000 horas. Estos sistemas son, por tanto, ideales para el alumbrado interior y público de zonas residenciales en aquellos lugares de difícil acceso para su recambio.
En jardines, patios y demás zonas a la intemperie, evite dejar luces encendidas instalando un reloj-programador de encendido y apagado o utilizando sistemas de célula fotoeléctrica, que apagan las luces cuando la iluminación ambiente supera un cierto nivel.
Para zonas ajardinadas, existen luminarias y globos de farola que minimizan la contaminación lumínica al dirigir el flujo luminoso hacia el suelo, sin que se "escape" luz hacia el cielo. Téngalo en cuenta.
A partir de una determinada hora de la noche se debería bajar el nivel de iluminación de zonas poco transitadas o desconectar algunas luces, manteniéndose aquellas que se consideren imprescindibles.
En todo momento, es muy importante iluminar solamente los espacios que lo requieran y no emitir luz hacia zonas no deseadas: además de ahorrar energía evitaremos deslumbramientos molestos.


Con los ascensores

Si su comunidad dispone de más de un ascensor, no los llame nunca simultáneamente y considere la posibilidad de bajar las escaleras a pie (o incluso de subirlas, si no son demasiados pisos): es una costumbre saludable y ahorrará energía.
En cualquier caso, proponga la instalación de un mecanismo de maniobra selectiva para reducir los viajes de los ascensores en vacío. Ahorrará electricidad y prolongará la vida de los mismos.
Es interesante que el interior de los ascensores no esté permanentemente iluminado. Proponga la instalación de detectores de presencia que activen el encendido de la luz exclusivamente cuando alguien entre en el ascensor.


La distribución del gasto en la Comunidad de Vecinos

Con la entrada en vigor del Reglamento de Instalaciones Térmicas de Edificios (RITE), las instalaciones colectivas de calefacción y agua caliente, construidas a partir de agosto de 1998, deben llevar un contador de energía térmica individualizado para cada usuario, de tal modo que cada vecino pague sólo lo que consume.
Si su vivienda es anterior a 1998, promueva la instalación de medidores individuales para la calefacción y el consumo de agua: conseguirá el reparto del gasto en función del consumo real y ahorrará entre un 20% y un 30%.
Un buen mantenimiento de los equipamientos de calefacción y agua caliente sanitaria centralizados puede representar ahorros de hasta un 20%.


El ahorro de agua en la comunidad de vecinos

Si en su comunidad dispone de zonas ajardinadas, proponga que se plante vegetación autóctona o que requiera poco riego.
Promueva los sistemas de riego de tipo goteo y el uso de agua de lluvia previamente acumulada para tal fin.
Si su comunidad de vecinos tiene piscina climatizada o piensa instalarla, es obligatorio utilizar exclusivamente sistemas de aprovechamiento solar para calentar el agua. La utilización de mantas térmicas para cubrir la piscina por la noche es otra idea para ahorrar energía.
En las piscinas, instale un programador que impida que la depuradora esté funcionando más tiempo del necesario.

Consejos para el consumo eficiente de Energía (7 de 7)

LA VIVIENDA EFICIENTE, COMO AHORRAR ENERGÍA SIN RENUNCIAR A LAS PRESTACIONES


INTRODUCCIÓN

La compra de una vivienda es una de las mayores inversiones que hacemos a lo largo de nuestra vida. Por este motivo, cuando decidimos comprar una casa, tenemos en cuenta factores tan importantes como el precio, el tamaño y la ubicación; y también nos interesamos por los acabados, las calidades de ciertos materiales, los equipamientos, etc. Sin embargo, hoy en día seguimos sin prestar casi atención a la "calidad energética" de la vivienda objeto de compra. Cuando la realidad es que una casa con cerramientos o acristalamientos inadecuados, aislamiento insuficiente e instalaciones de calefacción, agua caliente y refrigeración de mala calidad, además de no ser confortable, nos puede pasar, durante muchos años, una factura muy cara, debido a su alto consumo energético. Por todo lo anterior, es necesario que usted, como propietario o usuario de una vivienda, tenga conocimiento de los distintos factores que influyen en la eficiencia energética de una vivienda, así como de que existen leyes que le protegen. Sin ir más lejos, la Ley general para la defensa de los consumidores y usuarios permite al comprador de una vivienda de nueva construcción exigir al vendedor una "memoria de calidades" que le informe en este sentido, para su toma de decisiones.


LEGISLACIÓN

Como propietario o usuario de una vivienda, existen leyes que le protegen, acuda a ellas en caso de duda.
El Código Técnico de la Edificación, establecerá mayores exigencias en materia de aislamiento, iluminación, instalaciones de calefacción y aire acondicionado e instalaciones de energía solar. Su fin es reducir a límites aceptables el consumo de energía de los edificios; y que una parte de este consumo proceda de fuentes renovables.
El Reglamento de Instalaciones Térmicas (RITE) y sus Instrucciones Técnicas Complementarias, en fase de revisión, hacen referencia a las instalaciones de calefacción, agua caliente sanitaria y aire acondicionado y su mantenimiento.
La Certificación Energética, por la que cada edificio tendrá una calificación en función de la calidad de sus instalaciones de suministro de energía y de las características constructivas que afectan a su demanda energética (aislamiento, cerramientos, etc.), entrará en vigor a partir del año 2006.
Todo el anterior desarrollo normativo se encuadra en el marco de obligaciones que marca la nueva Directiva Europea de Eficiencia Energética en Edificios, aprobada el 16 de diciembre de 2002 (Directiva 2002/91/CE) y que obliga a los estados miembros de la Unión Europea a desarrollar medidas concretas que garanticen la mejora de la eficiencia energética en los edificios.
Si necesita información sobre aislamiento térmico puede ver la norma básica NBE-CT-79.
Y recuerde que la Ley General para la defensa de los consumidores y usuarios permite al comprador de una vivienda de nueva construcción exigir al vendedor una "memoria de calidades".


EQUIPAMIENTO ENERGÉTICO

Antes de construir, rehabilitar o reformar una casa es conveniente recurrir a expertos en materia energética que le asesoren.
En los próximos años será obligatorio en todos los países miembros de la UE un certificado energético para cualquier vivienda que se construya, venda o alquile.
Mediante la certificación energética, los compradores podrán conocer la calidad energética de una vivienda antes de comprarla.
Los promotores y constructores tendrán que utilizar componentes estructurales y equipamiento de mayor calidad con objeto de conseguir una menor demanda energética y, por tanto, una mejor valoración de sus construcciones.
Al construir, rehabilitar o reformar un nuevo edificio, acometa la instalación centralizada de producción de calor, ya que tiene rendimientos más altos que los sistemas individuales.
Elija calderas de condensación o de baja temperatura ya que tienen rendimientos más altos que las estándar.
Para producir agua caliente sanitaria procure elegir sistemas con depósito de acumulación de agua caliente.


AISLAMIENTO Y AHORRO ENERGÉTICO

Si va a construir o rehabilitar una casa no escatime en aislamiento para todos los cerramientos exteriores. Ganará en confort y ahorrará dinero en climatización.
A la hora de diseñar un edificio o casa aislada, es necesario tener en cuenta su aislamiento. Si queremos evitar el calor en verano se pondrá en la parte externa del muro; si se quiere evitar el frío en invierno, lo haremos por el interior. Recuerde que un buen aislamiento puede ahorrar más de un 50% de energía.
Otros puntos a tener en cuenta son la orientación del edificio, la superficie acristalada que tenga la casa, el tipo de paramentos, etc.
Elegir bien el tipo de vidrio, el tamaño de las ventanas y la orientación de las mismas es básico para ahorrar frio en invierno y calor en verano.
Un ático cerrado con buen aislamiento en techo y ventilación adecuada, reduce la ganancia de calor en un 25%.


LAS ENERGÍAS RENOVABLES EN CASA

Además de la captación directa de la energía solar a partir de los elementos estructurales del edificio (energía solar pasiva), existen otras posibilidades de aprovechar las energías renovables en nuestras casas, mediante el empleo de equipamiento específico capaz de transformar en energía útil la energía del sol, del viento y de la biomasa.
Procure la integración de las energías renovables en los sistemas de producción de frío, de calor y en la iluminación. Las más habituales son los paneles solares, los pequeños aerogeneradores y las calderas de biomasa.
En viviendas aisladas, considere la posibilidad de instalar sistemas mixtos de paneles fotovoltaicos con baterías de acumulación y aerogeneradores para la iluminación y los pequeños electrodomésticos.
Existen ayudas oficiales para promover la instalación de las energías renovables en las viviendas. Infórmese de las que ofrece su Comunidad Autónoma, así como las que promueve el IDAE. Todo ello está disponible y actualizado en http://www.idae.es/ y en las webs oficiales de las Comunidades Autónomas y Agencias de Energía.


ENERGÍA SOLAR TÉRMICA

Los sistemas solares pueden suponer ahorros en el coste de preparación del agua de aproximadamente el 70-80% respecto a los sistemas convencionales.
Los equipos para aprovechamiento térmico de la energía solar constituyen un desarrollo tecnológico fiable y rentable para la producción de agua caliente sanitaria en las viviendas. La inversión en paneles solares, además, puede amortizarse con el ahorro que se obtiene.
Las placas solares pueden ser un complemento interesante de apoyo a la calefacción, sobre todo para sistemas que utilicen agua de aporte a menos de 60 ºC, tal y como sucede con los sistemas por suelo radiante o en los de "fan-coil".
En la mayoría de los casos, tanto en viviendas unifamiliares, como en edificios, las instalaciones de energía solar térmica proporcionan entre el 50% y el 70% del agua caliente demandada, por lo que siempre necesitan un apoyo de sistemas convencionales de producción de agua caliente (caldera de gas, caldera de gasóleo, etc.).


APROVECHAMIENTO DE LA BIOMASA EN LA VIVIENDA

Existen sistemas de calefacción y producción de agua caliente sanitaria que utilizan la biomasa como fuente de energía.
En general, la biomasa es un combustible más barato que las energías convencionales.
La opción de la biomasa es especialmente recomendable para sustituir instalaciones de calefacción de carbón, ya que pueden aprovechar el mismo lugar de almacenamiento del combustible.
En el mercado existe toda una gama de calderas a partir de 90 kW de potencia para instalaciones colectivas y también pequeñas calderas o estufas para calefacción individual.
Las modernas calderas de biomasa disponen de alimentación en continuo y automatizada de combustible; y limpieza automática del intercambiador, con rendimientos de hasta el 90% y sin producción de humos visibles. También hay sistemas de compactación de cenizas que evitan tener que retirarlas todos los días, reduciendo esta tarea a dos o tres veces por temporada.
El uso de biomasa en nuestros sistemas de calefacción supone una disminución drástica en la emisión de CO2, ya que el producido por la combustión de la madera ha sido previamente, absorbido por esos mismos árboles, en la función de fotosíntesis.


ENERGÍA EÓLICA

La instalación de aerogeneradores, cuando son de baja o muy baja potencia, está indicada para viviendas aisladas que, además, se encuentren en zonas de vientos.


DISEÑO DE EDIFICIOS

Un buen diseño bioclimático puede conseguir ahorros de hasta el 70% para la climatización e iluminación de su hogar. Todo ello con un incremento del coste de construcción no superior al 15% sobre el coste estándar.
El diseño bioclimático no hace referencia a una arquitectura especial, sino simplemente a aquella que tiene en cuenta la localización del edificio y el microclima en el que se integrará, para adaptar el inmueble al enclave en el que será construido.
Actuando sobre aspectos como el color de los muros o los tejados, podemos ahorrar energía. Las paredes de color claro reducen la ganancia de calor hasta un 35%.
Un tejado color claro comparado con uno oscuro puede reducir la ganancia de calor en un 50%.
Tenga en cuenta que un edificio mal orientado y con una forma inadecuada puede necesitar más del doble de energía que uno similar bien diseñado y orientado.
La forma juega un papel esencial en las pérdidas de calor de un edificio. En líneas generales, se puede afirmar que las estructuras compactas y con formas redondeadas tienen menos pérdidas que las estructuras que tienen numerosos huecos, entrantes y salientes.
La orientación de los muros y ventanas influye decisivamente en las ganancias o pérdidas de calor de un edificio. En zonas frías interesa que los cerramientos de mayor superficie, los acristalamientos y las estancias o habitaciones de mayor uso estén orientadas al sur. Y los acristalamientos y superficies orientadas hacia el norte deben ser lo más pequeños posible.
En zonas muy calurosas, sin embargo, interesa que en las orientaciones con más radiación solar (sur y suroeste) se encuentre la menor superficie acristalada posible.
El diseño eficiente de un edificio o casa aislada procurará el máximo aprovechamiento de las energías gratuitas, evitará las pérdidas/ganancias de calor no deseadas y optimizará el buen funcionamiento de los equipos.
Actuando sobre la envolvente o piel del edificio se pueden captar, conservar y almacenar recursos energéticos del entorno inmediato. Además, el modo en que se coloquen los diversos huecos y la distribución de las distintas habitaciones podrá facilitar la ventilación natural.
Las ventanas y cristaleras, los invernaderos, los atrios y patios, con una adecuada orientación, permiten que la radiación solar penetre directamente en el espacio a calentar en invierno, lo que producirá un ahorro de calefacción.
En verano la disposición de los elementos de sombreado, como los voladizos, toldos y persianas, porches, etc., también podrán evitar ganancias de calor, reduciendo así la factura del aire acondicionado.
Un modo de evitar las ganancias de calor en verano es el uso de sistemas evaporativos y de rociado de agua. Así, colocar una cortina o lámina de agua en una pared, aumenta la sensación de confort en verano. El calor es absorbido por el agua al evaporarse y la pared se mantiene a una temperatura menor, con el consiguiente efecto refrigerante en el interior de la vivienda.
Los árboles, setos, arbustos y enredaderas, ubicados en lugares adecuados, no sólo aumentan la estética y la calidad ambiental, sino que además proporcionan sombra y protección ante el viento. Por otra parte, el agua que se evapora durante la actividad fotosintética enfría el aire y se puede lograr una pequeña bajada de temperatura, de entre 3 y 6 ºC, en las zonas arboladas.
Así mismo, los árboles de hoja caduca ofrecen un excelente grado de protección del sol en verano y permiten que el sol caliente la casa en invierno.
Además, si rodeamos de vegetación (césped, plantas, etc.) el edificio, en lugar de pavimento de cemento, asfalto o similares, lograremos disminuir la acumulación de calor.
Puede ahorrarse energía en iluminación, a través de diseños que consigan la máxima ganancia de luz, sin sobrecalentamiento indeseado.
Recuerde que la luz natural que entra en la vivienda depende no sólo de la iluminación exterior, sino también de los obstáculos, de la orientación de la fachada, del tamaño de los huecos y espesor de los muros, del tipo de acristalamiento, de los elementos de control solar existentes (persianas, toldos,...), etc.
Para optimizar la iluminación natural se precisa una distribución adecuada de las estancias en las distintas orientaciones del edificio, situando, por ejemplo, las habitaciones que se utilicen más durante el día en la fachada sur.


jueves, 12 de julio de 2007

FBEX ¡no gracias!



Esta sección la vamos a denominar “lo que te hace infeliz en esta vida”…
Pues muy bien amigos, he aquí un ejemplo el porque de mi infelicidad y la de 26 vecinos mas.

Se trata de luchar en contra de la enorme promotora inmobiliaria FBEX.
Esta inmobiliaria, creo que como muchas de las que hay en España, es una inmobiliaria sin escrúpulo alguno, llegando a mentir indiscriminadamente a los co-propietarios de las viviendas.

Entre muchos problemas que presenta la construcción, las mas importantes se pueden resumir en 4 puntos.

1º Nuestro edificio es “ilegal”, ya que tiene una ubicación incorrecta de la instalación de los aparatos de aire acondicionado. Están puestos en un patio de luz interior de 4 x 4 m. Uno de los problemas es que no pueden ir en un patio interior, según la normativa de la ciudad donde está la edificación. ¿Como lo intentaron arreglar? Poniendo una plataforma metálica para que disimulara y no se asemejara a un patio interior. Pero eso es falso según la normativa municipal eso sigue siendo un patio de luces interior. Ahora imaginaos, 27 aparatos de aire acondicionado encendidos a la vez en un patio de 4 x 4 metros. Entre el ruido, el calor y el aire que debe aspirar eso es impensable. Estamos entrando en este segundo verano y no han hecho nada de nada.
¡¡¡Solo nos falta denunciar!!!

2º Las memorias de calidad no se respetaron. A los vecinos que tienen galerías (donde ponen la lavadora, secadora e incluso la caldera de gas) en los proyectos iniciales éstas iban cerradas con lamas blancas. El ayuntamiento les denegó el proyecto este de las lamas y en lugar de dar una solución al respecto, FBEX optó por callarse como put… y no dijeron nada, con lo cual a la entrega de los pisos se vio que las lamas de las galerías no estaban. Protestamos contra este fraude y nos dijeron que el ayuntamiento no les daba permiso para poner nada. Y así de anchos se quedaron… Mas adelante fuimos al ayuntamiento para pedir poder poner algún tipo de cierre (porque en invierno con las heladas, la lluvia y todo tipo de inclemencias meteorológicas), lavadoras, secadoras y tubos de las calderas sufren pudiendo haber desgracias materiales y quien sabe si alguna de personal. Actualmente el ayuntamiento está estudiando el tipo de cierre apropiado y legal de la normativa vigente.
¡¡¡Solo nos falta denunciar!!!

3º Tenemos filtraciones de agua subterráneas provocando que poco a poco los huecos de los ascensores se vayan llenando y, que si llega a los cuadros eléctricos puede petar todo. Eso mismo pasa en el parking. Imaginaos un parking de 54 plazas (bastante grande) con ¡3 dedos de agua!. Esto pasó un día que se fue la luz, las bombas que evacuan las aguas subterráneas dejaron de funcionar, y poco a poco se empezó a inundar el parking. Lastimoso, nadie tuvo los santos cojon…s de hacer nada y tuvimos que esperar a que se evaporara el agua. Estuvimos mas de 2 meses hasta que no se secara por completo. ¿Sabéis cual fue la excusa? “Esto es normal en nuestra ciudad”. A mi personalmente me parece vergonzoso.
¡¡¡Solo nos falta denunciar!!!

4º La ilegalidad del parking. Según lo establecido en la normativa municipal las entradas y salidas de los parkings debe tener una anchura de cómo mínimo “X” cm. Pues esta, como no, hacía menos de lo permitido. Excusa de la constructora FBEX: “se ha tenido que mover una columna 20cm para que no haya dificultades por las aguas subterráneas”. Y el ayuntamiento no da la licencia de parking legal con la consecuencia de no poder pedir un VADO para que la gente no aparque delante y la imposibilidad de tramitar un seguro.
¡¡¡Solo nos falta denunciar!!!

Otras de menos importancias son las típicas humedades, grietas en las paredes,…

Hemos avisado que vamos a poner una demanda civil y nos han pedido que por favor que no lo hagamos ¿será porque es mala publicidad para FBEX?

Y todo esto amenizado por un administrador (AFYS) ineficaz y poco transparente que tuvo miedo de enfrentarse a esta gentuza. Haciendo falsas comunicaciones para que los vecinos se enfrentaran Lo mas normal era que lo echásemos (unanimidad de los vecinos)

Esperamos que todo se vaya solucionando y confiando en las negociaciones que puedan haber gracias al cambio de presidencia y un nuevos administradores.



Con ello queremos comunicar que somos 27 vecinos con un objetivo común:
TENER Y VIVIR EN UNA COMUNIDAD DIGNA

Y avisar que se están construyendo promociones en:

Provincia de Barcelona: 38 promociones

Provincia de Girona: 6 promociones

Provincia de Lleida: 3 promociones

Provincia de Tarragona: 7 promociones

Provincia de Huesca: 1 promoción

Islas Baleares: 10 promociones

Provincia de Castellón: 7 promociones

Provincia de Valencia: 18 promociones

Provincia de Alicante: 1 promoción

¿Puede ser que tengan problemas similares a los nuestros?

jueves, 5 de julio de 2007

¿Te apetece un Sudoku?

martes, 3 de julio de 2007

Kamasutra

Había una vez una mujer y un hombre que se querían mucho. Tanto se querían que cuando hicieron el amor por primera vez, empezaron a realiza posturas para gozar del sexo.



VTR


Si quieres bajarte estas diapositivas haz click AQUÍ